lunes, 31 de octubre de 2011

Nombres, marcas 3.1


A pesar de todo, la arquitectura continúa siendo la más honesta de todas las manifestaciones artísticas en cuanto que siempre es pública, nunca puede esconderse de la vista de los demás y al ser observada revela, muchas veces, más de lo que quisiera. Un país, una comunidad, puede ser rica en recursos naturales, éstos pueden ser los más solicitados, los más demandados, los más necesitados en todo el mundo, pero mientras estos recursos no se traduzcan en un beneficio material para los pobladores de esa comunidad o país, seguirá imperando la pobreza. Y una manera de medir la riqueza y el beneficio material es por medio de la arquitectura, nunca encontraremos una arquitectura de marca es una comunidad pobre. Si es verdad que somos una economía emergente, que somos una democracia, que existe una política social en el sector público pero también en el privada, entonces deberíamos tener una mejor arquitectura en nuestras ciudades y no nada más en los sitios de moda, en aquellos que tratan de hacer de la arquitectura un práctica artística privada.

(Imagen: blogs.laprensagrafica.com)

domingo, 30 de octubre de 2011

Nombres, marcas 3


Arquitectura que puede presumirse en cualquier lugar del mundo, arquitectura boutique, la hay, hoy en día, en cualquier país, en cualquier ciudad; se trata de un tipo de arquitectura que escapa a los clichés con que tradicionalmente consideramos, principalmente, a las construcciones de las naciones emergentes, y si rompen con ellos, con los clichés, es porque muestran más imaginación, técnicas de construcción innovadoras, empleo de nuevas tecnologías y costos, para estos países, extraordinarios. Se crean así espacios como el famoso Orquideorama en el parque Botánico de la ciudad de Medellín, Colombia, obra de Plan B Arquitectos y JPRCR Arquitectos, quienes crearon este admirable ambiente en el que, sin menoscabo del medio natural, luce la amplia y rica variedad de orquídeas que le ha dado fama mundial a este país, al igual que sus esmeraldas y sus finos granos de café. Sin duda es un buen ejemplo de esta arquitectura de marca de la que venimos hablando, el jardín botánico de esta tristemente célebre ciudad, está de moda, y si todo este esfuerzo ha de servir para reconstruir el lastimado tejido social de Medellín, quizás tenga, finalmente, un buen uso esta clase de arquitectura.

sábado, 29 de octubre de 2011

Nombres, marcas 2.1


Como si de satélites naturales se tratara, las grandes ciudades que nos deslumbran con su dinámica e innovaciones, tienen un lado obscuro que muchas veces no sólo ignoran sino que tratan de ocultar. Me refiero, claro está, a los cinturones de miseria que se van creando y creciendo en sus faldas. Se trata de asentamientos irregulares sí pero sobretodo de el único espacio que les es accesible a muchos que atraidos por las luces de la ciudad se diriguen hacia ella sólo para encontrar que las pocas oportunidades con que cuentan para incorporarse a la vida urbana, es sobrevivr en estos espacios. Lugares sin solución, sin atractivo, sin esperanza, sin interés para ningún tipo de arquitectura.

(Imagen://laarquitectura.blogspot.com)

viernes, 28 de octubre de 2011

Nombres, marcas. 2

Buenos Aires, Argentina, al anochecer.

Las ciudades como los arquitectos se han convertido también en artículos de boutique, en marcas que distinguen a quien habita en ellas o a quien las visita, hay que ir y estar en las ciudades de moda!
La ciudad es un fenómeno Moderno, es más, es uno de los elementos cenrales en el fomento de las artes, las ciencias y la tecnología pues había que atender a sus siempre crecientes necesidades; sin la ciudad y su dinámica, no habría habido por qué inventar y producir, por ejemplo, automóviles, o abrir centros comerciales o incluso hospitales. Pero si la ciudad es siempre cambiante, siempre rutilante, siempre atractiva, su lado obscuro es la marginación a la que condena a toda aquel que es incapaz de seguirle el ritmo, de sumerguirse en ella y convertirse en un citadino con todo lo que ellos significa de desarraigo, pérdida de la identidad, y nomadismo permanente.

jueves, 27 de octubre de 2011

Nombres, marcas. 1.1.

Livia Corona. Dos millones de casas para México. s/f

Es evidente, creo, el fuerte contraste que se crea entre la sobria y refinada arquitectura de Legorreta -y otros como él-, en exclusivos fraccionamientos y desarrollos urbanos, y los dos millones de casas para México que anunció en su momento el presidente Fox; me parece que no estaba pensando en el primero, y ese, ese es el problema precisamente, que construimos para dos mundo separados, diferentes, y en lugar de puentes que los unan abrimos más y más el abismo que media entre ambos. Mientras la arquitectura de autor, con nombre y marca nos distingue, las construcciones que aquí vemos vuelven anónimos a sus habitantes, los homogenizan, los hunden en la mediocridad de una mercadotecnia que lo mismo vende falsas ilusiones que construcciones de cartón.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Nombres, marcas. 1

Ricardo Legorreta Magna Biblioteca Raúl Rangel Frías.
Monterrey, N.L. 1994

En las seis siguientes entregas seguiré abordando el tema de la distancia entre esta arquitectura de marca más que de nombre, y la realidad arquitectónica de países como el nuestro. Nada tengo en contra de este tipo de arquitectura y mucho menos de sus autores, sólo planteo la necesidad de reflexionar hasta qué punto el consumismo desmedido nos ha hecho olvidar necesidades básicas o valores fundamentales como el de la solidaridad, y cómo, por estar a la moda, hemos dejado de lado la atención a otras necesidades más apremiantes, no para los consumidores sino para los que ni siquiera se verán beneficiados con la apreciación, el disfrute de estas obras. En resumen, son algunas reflexiones sobre la responsabilidad social de la arquitectura hoy en día.

martes, 25 de octubre de 2011

Arquitectura boutique

Douglas House. Lago Michigan. 1966-67


            El pasado día 20 el MARCO abrió la muestra Richard Meier retrospectiva, dedicada al arquitecto norteamericano ganador del premio Pritzker en 1984. Con esta exhibición crece el abanico de muestras que este museo le ha dedicado a la arquitectura, las de Legorreta, Frank Loyd Wright, Enrique Norten, la más reciente de Norman Foster y ahora esta; un buen número pues, de exhibiciones y de arquitectos se han expuesto al escrutinio del público regio, el cual, por lo que se ve, aprecia los esfuerzos del museo por traer o armar este tipo de exposición.
            En el caso de Meier, su muestra tiene el encanto de ser breve pero al final dar la sensación de haberlo visto todo, de que ya se conoce la obra de quien está exponiendo. A través de catorce proyectos —tres de los cuales no se construirán— se nos hace saber no tanto la trayectoria del arquitecto (a pesar de que hay una arco temporal que va del 65-67, Smith House, al 2009, Liberty   Plaza) como de la evolución de los  distintos elementos que emplea para dar forma al espacio (llamo la atención más que en la  explotación de la luz y el uso del    color, sobre el trabajo que hace  con las cubiertas que bien podría  tratarse de un elemento más en su  vocabulario); de esta manera, la  adecuada selección de los  ejemplos, los extraordinarios  dibujos a mano alzada, los render,  las proyecciones axiométricas y las maquetas, completan la información suficiente y necesaria para saber del proyecto y sus propuestas y hacer de la muestra una excelente exposición.
            Como con otros medios que han ido tomando las salas de los museos, armar y montar una exposición de arquitectura no es nada sencillo, y llegar con ella a un público que por lo general y ante lo poco conocido se muestra hostil y desconfiado, es más complicado aún, por lo que sorprende que el MARCO haya tenido tan buena suerte con las muestras que lleva expuestas. Creo que podemos coincidir en que la apreciación de la arquitectura no es igual a la de la pintura, que requiere, para ser justa y correcta, de un mínimo de conocimiento que asegure que los juicios que se emiten sobre ella, sean hechos con un mínimo de competencia.
            Por la privilegiada posición que posee la arquitectura entre nosotros, me estará permitido preguntar entonces hasta qué punto estas exposiciones han contribuido a enriquecer nuestra cultura arquitectónica, qué tanto han mejorado nuestro perfil arquitectónico. Con toda sinceridad puedo contestar que muy poco y no porque museo, escuelas, maestros, alumnos y arquitectos en general no se hayan aplicado, visitando, comentando y hasta siguiendo a los arquitectos que han tenido la suerte de presentar su trabajo aquí, sino porque una cosa son las obras que se aprecian en las exposiciones y otras las que se construyen en la ciudad.
            En la vida esquizofrénica que empieza a ser característica de los regiomontanos de este principio de siglo, saber de Meier, Legorreta, Foster y compañía, es lo mismo que saber de Calvin Klein, Dolce y Gavana, Carolina Herrar o Gucci, es decir interesa una arquitectura de marca, no el resultado material sino el simbólico que es el que termina por socializarse y convertirse en un distintivo de identidad y de clase.
La ciudad sigue siendo tan fea como de costumbre, las obras que en el pasado nos representaron (el “servilletero” del Tec) se hicieron más pronto que tarde, viejas, y las que se construyen hoy día (torre administrativa del gobierno del estado) amen de ser monumentos al fraude y al diseño “fusilado”, en muy poco contribuyen a mejorar nuestro perfil arquitectónico.
            Pero los verdaderos responsables por esta arquitectura de boutique, de poca o ninguna responsabilidad social, somos sus usuarios y más que eso, los grandes capitales trasnacionales que financian estas obras que benefician a quién sabe quién, pero que más allá de ser un extraordinario espectáculo, poco o nada dejan al lugar donde se presentan.

Publicado originalmente por Milenio Diario


lunes, 24 de octubre de 2011

Para leer y escribir (F)



El futuro estará sin duda ocupado igualmente por el libro tradicional (que sin embargo irá menguando por las razones que hemos dado) que por las nuevas posibilidades de edición y distribución de distintos géneros de texto. Habrá medios que sí sean desplazados totalmente como es el caso de la prensa escrita, pero no porque la prensa sea obsoleta, sino porque ella nació con la idea de informar sobre lo más reciente y eso hoy en día lo hace mucho mejor el internet y las redes sociales que el periódico tal y como lo conocemos. No obstante, ninguna otra forma se verá superada, cuando mucho se complementarán con otras tantas posibilidades que los medios digitales ponen a nuestra disposición. Juzgar qué tanto nos benefician, que tanto nos acercan al ideal de comunidad de individuos productivos y felices, es tarea de otros; nosotros, por diferentes que sean, por amenazadores que parezcan, no podemos menos que darles la bienvenida, este es el futuro hoy día y no hay nada que lo vaya hacer cambiar.

domingo, 23 de octubre de 2011

Para leer y escribir (E)


El libro es, por supuesto, el medio a través del cual se da a conocer, se hace público, un texto, pero éste, antes tuvo que ser escrito. La historia de la escritura y de los instrumentos o medios que se emplean para llevarla a cabo se remonta en el tiempo, los manuscritos son tan antigüos como los mismos libros, o mejor dicho los papiros y códices; no será sino hasta la aparición de la imprenta que los libros dejaran de ser conocidos a través de la mano de su autor, un redactor o un copista. Así como una rama del libro evolucionó hacia los e-books, estos se hicieron acompañar de otra interfase, una táctil o que respondiera y ejecutara diversas tareas con tan sólo tocar la pantalla del ordenador, de ahí nació el lápiz óptico que da la facilidad de escribir como si lo estuvieras haciendo sobre un papel, restaurando de esta manera un sentimiento con respecto a la escritura y la lectura, el toque humano o la seguridad de que es una persona de carne y hueso quien está detrás del texto.

(Imagen: www.xataka.com)

sábado, 22 de octubre de 2011

Para leer y escribir (D)


El libro tal y como lo conocemos hasta este momento va íntimamente ligado al desarrollo de la imprenta, es decir del siglo XV a nuestros días. Si lo vemos en esa perspectiva por supuesto que mucho se ha avanzado y gracias a esta innovación tecnológica hoy dia la difusión masiva del libro es posible. Mas si lo vemos desde la perspectiva del medio en sí mismo, la verdad es que poco se ha modificado. No hay gran diferencia entre un libro del siglo XIX por ejemplo y uno de nuestros días; quizás haya mejor diseño, más gusto en los detalles, más cuidado en la selección de los materiales, más claridad en las tipografías, pero en sí siguen siendo lo mismo y lo más probable es que lo sigan siendo con los libros que se impriman en el futuro; lo que sí cambiará y cada vez con mayor celeridad serán sus primos hermanos los e-books que tarde o temprano tendrán que escribir su propia historia con independencia de los hijos de Gutenberg.

viernes, 21 de octubre de 2011

Para leer y escribir (C)


Quizás la distinción fundamental entre las épocas prehistóricas y las históricas sea la presencia de la escritura, ya que ésta otorga no sólo legitimidad a los relatos fundacionales sino que los convierte en verdad eterna. Y si como hemos visto en otros lugares y civilizaciones se fue inventando, asentando y generalizando el uso de la escritura y su medio de transmisión los libros, en el caso de mesoamerica la situación es similar, lo que se puede comprobar fácilmente a través de los códices que han llegado hasta nuestro días. Tal es el caso del llamado Códice Chiconquiaco producido aproximadamente en 1542 en la región de Veracruz y que narra el origen del grupo Totonaca. Por fortuna este es uno de los casos en que tan valioso documento se encuentra en nuestro país; actualmente bajo el resguardo del Museo Antropológico de Xalapa.

jueves, 20 de octubre de 2011

Para leer y escribir (B)

Shijin (Libro de las Odas) versión del siglo XVI

De remotos orígenes la civilización China desarrolló, como se sabe, una variedad enorme de manifestaciones culturales y artísticas que hoy día siguen sorprendiendo por su calidad y perfección. El Libro de las Odas, fue escrito entre los siglos X y VII a.C., y es un claro ejemplo del desarrollo artístico que ya para ese momento habían alcanzado. Como en otros lugares, la escritura China se empezó a prácticar en rollos de papiro que luego fueron substituido por hojas sueltas o códices, que es como la mayoría ha llegado hasta nosotros.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Para leer y escrbir (A)


A partir de hoy y hasta el próximo lunes, estaré subiendo ejemplos que nos permitirán ir viendo la evolución de la escritura y los libros, a la vez que insistir en que ninguno substituyó o remplazó al otro. Si hoy día hay formas, practicas y medios que han desaparecido se debe más bien, sí al desarrollo tecnológico, sí a su falta o lenta funcionalidad, a la aparición de nuevos y más resistentes materiales, a una mayor eficientización de tiempos y movimientos, pero sobretodo por la evolución interna del propio medio, una especie de virus maligno que ataca a todos los medios y servicios concebidos en el mundo moderno que termina por llevarlos a su desaparición o desmaterialización. Es en esta línea que adquire sentido hacer un alto y revisar cuál es el camino que se quiere seguir para qué y hasta dónde, si es que se puede poner límite a eso. Así pues estas son las reflexiones a las que queremos contribuir esta semana empezando con un fragmento del famoso Libro de los muertos, posiblemente el patriarca de este género con más de 1300 años de antigüedad.


martes, 18 de octubre de 2011

Usos y deusos


Uno de los temas que se presentaron y debatieron en la recién concluida Feria Internacional de Libro, fue, el futuro que le aguarda, no a la feria, sino al libro. Pensadores como Roman Gubern hicieron la defensa a su favor, a la vez que le auguraron una larga y venturosa vida.
El tema no es ocioso, se ha vuelto popular debido a la presencia, ya no circunstancial, de los llamados e-books, o libros electrónicos, que como nos hemos enterado ya han desplazado en ventas al libro tradicional en las grandes  distribuidoras mundiales (Amazon). Así que se va generalizando la impresión de que tarde o temprano estos libros virtuales terminaran por desplazar a ese raro objeto por el que tenemos sentimientos encontrados, llamado libro.
Temas y argumentos parecidos han salido a la luz respecto, por ejemplo, a la imagen digital. Hace unos meses, de visita en la ciudad, la fotógrafa Cristina Kahlo, se mostraba partidaria de la imagen análoga y hacia ver sus cualidades sobre la digital. La discusión la podemos  rastrear en  el campo de la  música, y más allá  en el de la  literatura al hablar de  cómo se  van perdiendo habilidades y prácticas tales como el  redactar una carta o un memorándum. Y ni qué  decir de las redes sociales que  desplazan formas de socialización reales a favor de las virtuales o electrónicas. En todos los casos se trata de defender formas previas del medio o de protegerlas ante la amenaza que suponen formas  más nuevas o que de plano lo innovan por completo.
Cuando en 1839 François Aragó presentó ante la Academia de Artes y Ciencias de París el invento de Daguerre, el pintor Paul Delaroche, se levantó anunciando que la pintura había muerto. A casi dos siglos de aquella premonición, fotografía y pintura continúan gozando de excelente salud, es decir, la fotografía jamás supuso una amenaza para la pintura, ni esta languideció ante la presencia o irrupción de aquella.
Cito este pasaje porque me parece nos puede ayudar a comprender esta situación. Si la fotografía no substituyó a la pintura, se debe a que son dos medios distintos, dos lenguajes que reproducen la realidad de manera diferente por lo que cada cual tiene su versión que antes que competir se complementan, enriquecen la reproducción de imágenes y nos enriquecen a nosotros como espectadores.
Por fortuna el ego de Daguerre impidió que su invento se llamara pintura de luz o pintura con luz; la denominación daguerrotipo llevó al Henry Fox Talbot y demás colegas a buscar otro tipo de nombre hasta dar con el de fotografía. Creo que algo parecido debe suceder con los libros, mientras sigamos llamándolos con el mismo nombre siempre nos parecerá uno mejor o peor que el otro, o que uno, el más nuevo, desplazará al más viejo, cuando en realidad se trata de dos medios con posibilidades por completo distintas; un libro electrónico jamás será igual a uno de papel, porque es otra cosa, no es un libro es la pantalla de un ordenador; un correo electrónico, un mensaje por twitter o messenger, nunca podrán igualarse a una carta manuscrita no porque ésta esté superada, sino porque son dos prácticas distintas, con fines y objetivos también distintos. Mientras no encontremos mejores denominaciones para las innovaciones que el mundo digital nos ofrece seguiremos cayendo en este tipo de discusiones y en trampas que nos hacen creer que el mundo tal y cómo lo conocimos está a punto de desaparecer (lo que sucederá sin duda y está sucediendo pero no apocalípticamente como se quiere dar a entender cuando se argumenta a favor de los medios y prácticas del pasado).
La producción editorial sí disminuirá en el futuro y ojalá no sea un futuro muy lejano, pero porque la producción de papel se verá acotada, esto sí es un freno real al libro tal y como lo conocemos pero es a cambio de un bien, el que nuestro nietos conozcan los árboles y bosques, mientras nosotros nos acostumbramos a leer en la pantalla del ordenador.

Publicado originalmente por Milenio Diario
(Imagen: www.xateka.com)

lunes, 17 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León VI


Me tomo la libertad de presentar la fotografía del último productor de Nuevo León que subiré en este grupo. Se trata de Sergio de Osio S. y pongo su imagen en lugar de su obra, no porque esta sea inexistente, sino porque él es uno de esos raros casos en donde lo más importante no es lo que hace sino quién lo hace, cómo lo hace y para qué lo hace. Curioso incansable, de Osio ha explorado y mapeado el mundo de la obra gráfica como muy pocos en este país y, quizás, en el mundo, lo que le ha valido el reconocimiento local e internacional. Pocos productores han sido, por otra parte, tan influyentes como él en la escena cultural de la ciudad, ya como maestro, ya como animador o incluso promotor, de Osio es parte indivisible del transfondo cultural de Monterrey.

domingo, 16 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León V




Formada en Monterrey y en Nueva York, Diamantina González es otra más de las productoras de Nuevo León que sin mucho aspaviento y menos difusión, ha logrado ir consolidando una trayectoria importante, especialmente en el campo experimental que es a donde se ubica actualmente trabajando instalaciones con base al video y otras tecnologías de punta. Sin lugar a dudas González es una de esas productoras que serán recordadas como pioneras en su campo.

sábado, 15 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León IV

Claustro. 2002

Pocos escultores hay en este momento en México que tengan la personalidad y trayectoria que posee Gerardo Azcúnaga. Dueño de una temática, técnicas, procesos y propuestas que quizás le deben más a la literatura que a la propia escultura, Azcúnaga ha explorado facetas, dimensiones, formas, que la estética tradicional con que se trabaja la escultura había preferido poner de lado para lanzarse por los caminos del hedonismo y el facilismo conceptual.

viernes, 14 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León III


Aunque coahuilense por nacimiento (Nueva Rosita), Gerardo Cantú es con todo derecho un productor de Nuevo León. De su amplia trayectoria destacamos su trabajo como grabador, especialmente, con el buril. Estos trabajos sobresalen  por la limpieza, seguridad y tono de la línea con que perfila temas lúdicos y del real maravilloso que se encuentra en nuestro inconsciente colectivo; en todos, la mujer es el leit motiv que anima todo su quehacer, sea que se trate de obra gráfica o pintura.
(Imagen: http://tadeox.com)

jueves, 13 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León II

Galería de Jazz.art

Un buen ejemplo de la escultura que se práctica en Monterrey, y qué mejor ambiente para mostrarla que los barraganescos muros del MARCO y, más allá, el no menos famoso Cerro de la Silla. La pieza corresponde a una serie presentada por Miriam Medrez en uno de los patios del referido museo, serie que culminaba un programa de trabajos que incluía la diversidad de dimensiones, materiales y formas, y que de alguna manera confirmaba la calidad e interés que los trabajos de Medrez poseen y la han proyectado nacional e internacionalmente.

(Imagen: www.flickr.com)

miércoles, 12 de octubre de 2011

Productores de Nuevo León I


Esta semana subiremos obras de algunos de los productores más representativos de las artes plásticas de Nuevo León, y qué mejor manera de hacerlo que empezando por presentar una obra del maestro Rodolfo Ríos, paisajista de recia personalidad egresado de la primer generación del ya legendario Taller de Artes Plásticas de la entonces aún Universidad de Nuevo León. La pintura de Rodolfo Ríos, sin duda, es el mejor ejemplo del carácter, personalidad y talento de quienes se formaron en tierras de la Gran Chichimeca.

(Imagen: www.milenio.org)

martes, 11 de octubre de 2011

Pinacoteca



Más pronto cae un hablador que un cojo. Hace unas semanas me disculpaba por comentar la exposición de Jorge Elizondo proyecto en el que, como dije, tuve una participación marginal. Explique que no me gusta hablar de trabajos en los que estoy o estuve involucrado, para evitar se me acuse de autopromoción.  No obstante, hoy quisiera extender un par de comentarios que el domingo por la noche externé en la presentación del libro de la colección de la Pinacoteca de Nuevo León, proyecto, este sí, en el que estuve involucrado, junto con Silvia Vega, desde hace mucho y de principio a fin.
            El libro contiene una selección de 122 productores que creímos son una buena representación del quehacer y de quienes se encuentran en la colección de la Pinacoteca. Aunque no es esa la intención, sí se pueden recorrer, por medio de las obras que se presentan, los más de cien años que median entre los pintores y escultores del siglo XIX y los más recientes. Una historia de más de 100 años no me parece despreciable, y que pueda ilustrarse con más de un ejemplar aumenta su importancia. Hay que tomar en cuenta que no fue sino hasta que el desarrollo industrial y económico de la ciudad se  estabilizó de manera más o menos definitiva, que el interés por la producción artística se volcó a la esfera pública, es decir, sólo hasta entonces se pudo empezar a pensar en recuperar piezas que quizás estuvieron olvidadas por décadas en sótanos, almacenes o casas de antigüedades, y que son ejemplo, precisamente, de lo que se pintaba a fines del siglo XIX. Pero además, fue también a partir  de ese momento que el gusto que    se venían cultivando no sólo saltó a la esfera pública sino que se reconoció su valor, reconocimiento que al paso de 50 años se ha transformado en una infraestructura cultural inferior únicamente a la del Distrito Federal, y en la profesionalización universitaria de sus productores. Así que si lo vemos con más atención formación de una colección y productores aceptados, reconocidos y requeridos socialmente, son tareas que apenas rebasan la media centuria, por lo que una selección de 122 productores que representen ese quehacer, me parece un número muy respetable y si al número le sumamos calidad, el panorama se ve y aprecia de otra manera.
            Ahora bien, contar con esta colección —de la que se pueden hacer muchas otras selecciones— y darla a conocer no sólo a través de exposiciones sino de un libro producido ex-profeso, es un gran logro, pero también una responsabilidad. Un logro porque lo que durante tanto tiempo no tuvo un verdadero reconocimiento, ahora demuestra su valor e importancia. Nadie, de ahora en adelante, puede negar que haya una historia que conocer y seguir, ni productores que estén a la altura de cualquier otro en el país o más allá si se quiere. Pero es una responsabilidad porque una colección debe estar en constante transformación, es decir, implica un crecimiento y enriquecimiento permanente y para eso necesita, entre muchas otras cosas, una sede; un espacio en el que se presente de manera permanente y se someta a lecturas, interpretaciones, curadurías diversas con las que se armen programas de exhibiciones temporales. Pero también un espacio que se abra a la investigación, la conservación y preservación de los ejemplares que contenga la misma; no es sencillo conformar una colección, menos aún es mantenerla.
            Por último hay que subrayar que la única persona que creyó en el proyecto y entendió su importancia fue Elvira Lozano, actual directora de la Pinacoteca, y que gracias al apoyo que recibió de Carmen Junco, la presidenta del CONARTE, se logró concretar lo que incluso estuvo muchas veces a punto de diluirse entre los activos del gobierno del estado, sino es que simplemente desaparecer. Gracias pues a este libro y al trabajo de catalogación que ha hecho el personal de la pinacoteca, ahora sí se puede decir papelito habla.

Publicado originalmente por Milenio Diario


lunes, 10 de octubre de 2011

Así lo vio VI


No hay nada más aterrador que las fuerzas de la naturaleza desatadas, y entre estas la furia de un Tsunami debe ser de las más devastadoras. Imágenes como la que vemos (Japón, 2011) nos llevan a confirmar lo dicho, pero también a reconocer que este es uno de los servicios más importantes que puede presetar la fotografía documental. Si otras fotografías del mismo género pueden movernos a la duda y la sospecha por los intereses que se ponen en juego cada que una imagen entra en circulación (sea del género que sea), las que muestran este tipo de eventos son simple y llanamente documentos visuales que atestiguan nuestra fragilidad frente a la naturaleza.

(Imagen: www.taringa.net)

domingo, 9 de octubre de 2011

Así lo vio V

Ejercito detiene a protesta de jóvenes, Santiago de Chile. EFE, 2008

Una imagen que por desgracia empieza a ser de nuevo común, nuestras juventudes toman las calles para protestar por lo que consideran injusto o inmoral, y los gobiernos, como siempre, se muestran insensibles a sus argumentos, aunque con el tiempo terminen por demostrar que tenían razón. Imágenes cuya lectura depende de qué lado de la fotografía te encuentras.

sábado, 8 de octubre de 2011

Así lo vio IV


Las nuevas tecnologías aplicadas a la comunicación individual o de masas sin duda han modificado muchas -quizás más de las que podemos reconocer de inmediato- pautas, estilos y formas de vida, incluidas, irónicamente, aquellas que nos enfrentan directamemte a eventos tan condenables como lo puede ser una guerra, convirtiéndolos en espectáculo televisivo. Se recordará que esto fue lo que sucedió cuando en 1991 veíamos "en vivo y a todo color" los bombardeos de la llamada coalición internacional sobre Bagdad con lo que daba inicio la tristemente célebre operación "Tormenta del desierto",

viernes, 7 de octubre de 2011

Así lo vio III

AFP. Refugiados de Somalia.

De acuerdo a lo presentado es cierto que una imagen no nos dice más que mil palabras, pero hay otras ocasiones en que una sola imagen es capaz de mover nuestra sensibilidad mucho más allá que lo que pueda hacer un libro completo. Imágenes como la que aquí vemos deberían hacer que ninguno de nosotros volviera a dormir en paz mientras estos niños y sus también niñas madres mueren de hambre. Algo no está funcionando cuando ni las palabras ni las imágenes son capaces de revertir situaciones como las que vive la población más desprotegida de países como Somalia.

jueves, 6 de octubre de 2011

Así lo vio II

Spencer Platt. Beirut, Libano. 2006

Seguramente ustedes recordarán esta imagen, fue la ganadora en el 2006 del premio anual que otorga la organización Worl Press Photo. La polémica que generó, provocada o no, me parece es una demostración de la poca fiabilidad que tienen las imágenes por sí mismas y eso que no estamos hablando de aquellas que se someten, interesadamente o no, a las modifciones propias de la era digital. Al parecer una imagen no vale más que mil palabras.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Así lo vio I

Gerda Taro. Milicianas en 1936.

Las siguientes seis entregas las dedicaremos a la presentación de imágenes fotográficas relacionadas con el testimonio de algún conflicto social o político. La vastedad del tema, como se sabrá, indica la fuerte tendencia por ver en la fotografía el mejor y más puro reflejo de la realidad, y hacer de ella el instrumento ideal para la denuncia y el activismo social. Recorrer algunos ejemplos del género no es sólo reflexionar sobre la terribilidad que pueden alcanzar estos temas, o sobre la relación realidad- representación, sino también acerca de la idoneidad del medio para crear consciencia en el espectador.

martes, 4 de octubre de 2011

No se olvida

Héctor García. Manifestantes y tanquetas en el zócalo. 1968

El dos de octubre continúa siendo una fecha incómoda para la historia de nuestro país, no importan los 43 años que median entre aquellos sucesos y nuestros días; como tampoco las Comisiones de la Verdad y demás iniciativas que buscan ofrecer una verdad oficial que sea convincente y justa para todos; o las marchas y reclamos de los supervivientes, de los otrora líderes del Consejo Nacional de Huelga; o las crónicas, películas y fotografías que dan, cada cual según su perspectiva, su versión de lo acontecido aquel aciago día.
 Independientemente de lo anterior y de cual sea nuestra postura frente a la historia, lo que resulta incuestionable es que a partir de 1968, México cambió, o si se prefiere, se puede decir que nuestro país era uno antes de esa fecha y otro después de ella. Se trata pues de un parteaguas —como después los terremotos de 1985 o el levantamiento zapatista en 1994— que afectó, por igual, a la sociedad, la política, la educación y la cultura de nuestro país, y en ese sentido la fotografía no fue la excepción.
 Hay un número nutrido de fotógrafos que, de una u otra forma, participaron en el registro de los acontecimientos. Autores de las imágenes que se publicaron en su momento, de otras que fueron literalmente secuestradas, de las que se destruyeron voluntariamente o al  arbitrio de las autoridades, de las  que se han descubierto y de las que aún duermen el sueño de los justos, posiblemente echándose a perder, en archivos de periódicos (como los localizadas en El Universal en el 2005), revistas o de los propios fotógrafos.
 Manuel Rojas, Héctor García, Daniel Soto, Enrique Metidines, Antonio Salgado, Pedro Valtierra, Manuel Gutiérrez Paredes, el Mariachito (fotógrafo personal de Díaz Ordaz), o Pedro Meyer, son sólo algunos de otros muchos que haciendo su trabajo, buscando la noticia o dar testimonio de lo acontecido, testimoniaron lo que iba sucediendo con el movimiento estudiantil, y en particular la tarde noche en la plaza de Las Tres Culturas en Tlatelolco.
 Su trabajo, como el de muchos otros, definió en buena medida las funciones, las formas y los contenidos de la fotografía en México por lo menos las siguientes dos décadas, pues no sólo puso a la fotografía en el debate de las expresiones simbólicas reclamando un lugar (la primera bienal de fotografía organizada por Bellas Artes es de 1980 aunque desde el ’77 se habían presentado imágenes fotográficas en la bienal de gráfica de donde fueron rechazadas), sino que dio lugar a la creación del llamado Consejo Mexicano de Fotografía y la más importante de las actividades organizadas en ese tiempo los Coloquios Latinoamericanos de fotografía (el primero en 1978 y luego dos más, el última en la Habana, Cuba, en 1984) y posteriormente el Coloquio Nacional de Fotografía también en 1984.
 La importancia tanto del trabajo realizado por los fotógrafos citados como de las orientaciones surgidas de estos eventos, radica, ya lo hemos dicho, en que ahí se forjó la idea de hacer una fotografía social, solidaria, de denuncia, un medio de comunicación que debía poner al descubierto los males que aquejaban a nuestras sociedades y expusiera a los verdaderos enemigos del pueblo. Quizás en ese momento este era el clima ideológico en toda América Latina; quizás las luchas contra las dictaduras del cono sur, despertaban las simpatías de muchos dentro y fuera de las fronteras de América del Sur; y quizás la fotografía debió jugar ese papel en ese momento. El problema fue que se convirtió en un cartabón que impidió por mucho tiempo el desarrollo y reconocimiento de otros géneros, de otros usos y otras funciones para la fotografía.
 Gracias a las imágenes fotográficas podemos darnos una idea de qué sucedió el dos de octubre de 1968; valorarlas, apreciarlas, darles la importancia que merecen, es también reconocer ese momento como parte de la historia de la fotografía en México.

Publicado orginalmente por Milenio Diario

lunes, 3 de octubre de 2011

Suma 1+5

Domingo Valdivieso. Sin título. s/f

Encomiable en verdad son todos lo esfuerzos por dar a conocer y promocionar los trabajos y los autores de un lugar, de una disciplina, pero entonces ¿por qué no citar correctamente?

domingo, 2 de octubre de 2011

sábado, 1 de octubre de 2011

Suma 1+3

Ana Carolina Camarena. Cultura POP. s/f

Un ejemplo más del trabajo realizado por las fotógrafas de Monterrey.

(Imagen: http:acarolinacamarena.blogspot.com)