Por sus características inherentes, la fotografía ocupa un lugar privilegiado entre los documentos probatorios con que se cuenta en la actualidad, es decir, según el sentir general, lo que aparece en una imagen fotográfica prueba la existencia, la verdad, la presencia, de lo que ahí se muestra y los demás vemos.
De entre las fotografías a las que más recurren los aficionados se encuentran las de grupo, el deportivo, el de los compañeros de oficina, la familia, los de la escuela o universidad, o como en este caso, simplemente de los que acuden a un club deportivo o social; siempre hay un grupo que fotografiar y la oportunidad no se hace esperar. Fotografiamos grupos para no sentirnos solos, por solidaridad, por afirmar los lazos sociales que impiden la disgreción, y por lo menos en la imagen mantenemos el espíritu del grupo o grupos a que pertenecemos. Y para probarlo, para certificar que así fue, ahí esta la fotografía ¿cómo dudarlo?
(Imagen tomada de www. trainingtime.com.ar/poledance_comentarios.htm)
No hay comentarios:
Publicar un comentario