domingo, 25 de abril de 2010

Las nuevas imágenes


La posibilidad de convertir prácticamente toda percepción visual en imagen permanente gracias a las nuevas tecnologías digitales y su aplicación a las cámaras fotográficas, más la posibilidad de difundir masiva y públicamente esas imágenes, han trastocado una buena parte de nuestra cultura contemporánea. Desgraciadamente, por una parte, no se ha enriquecido la práctica de la comunicación visual, se ha transformado, es distinta hoy día, sí pero no tenemos mejores imágenes. Por otra, ha ensanchado a tal grado la iconósfera que los antiguos sistemas de discriminación han dejado de operar, no por obsoletos sino por ser incapaces de procesar tanto material. Y, fnalmente, han provocado la aparición de imágenes que hasta hace una década eran impensables o bien su circulación era restringida y de difícil acceso. Estas nuevas imágenes que pueblan los espacios virtuales, como la que vemos aquí mismo, tienen la curiosa característica de ser, en la mayoría de los casos, autoimágenes, una práctica que ciertamente no es nueva, sólo que ahora se realiza no como exploración de la propia personalidad, de cómo me ven los demás, sino únicamente como una manera de tener presencia en ámbitos igualmente inéditos para la persona, en sitios a los que, probablemente y menos simultáneamente, se podría llegar en carne y hueso.
(Imagen tomada de www.cuernavaca.olx.com.mx)

No hay comentarios:

Publicar un comentario